Para este hechizo, toma una manzana que no sea ni muy verde ni muy roja. Enciende una vela roja y enciende un trocito de carbón. Cuando el carbón esté ya caliente pon encima unas hierbas. Echa un poco de aceite de jazmín en tus manos. Frota tus manos con el aceite, mientras piensas en la persona amada.
Ahora con un trapo, (que no sea negro), saca brillo a la manzana por su lado más verde. Mientras realizas esto, pronuncia las siguientes palabras:
“Fuego de la vela roja rodéame de tu energía, al igual que el trapo a la manzana. Carbón calienta el corazón de mi amado, al igual que tú a estas hierbas. Haced que venga a mí, me ame y se quede a mi lado”.
Al igual que has realizado este ritual por el lado verde de la manzana, repite el mismo proceso por el lado rojo. De esta forma, aseguras que se quede a tu lado, tanto al principio de la relación, como hasta la madurez de la misma. Esto es para siempre.
Repetiremos este proceso hasta que la llama del carbón se extinga. Por último, deja enfriar la vela y envuélvela, colocándola en un lugar oscuro. En cuanto a la manzana, deberás guardarla en un lugar oscuro, pero si consigues que tu persona amada se la coma, aumentará el efecto de este hechizo de amor para enamorar.
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